

Por: Redacción TYL
Aldo Gasparini es economista y asesora a empresas transportistas de cargas. Fue uno de los disertantes de la mesa de debate sobre "Crisis y oportunidades de financiamiento para pymes" que organizó esta semana la FADEEAC en el marco de la Expo-Transporte.
-- ¿En semejante volatilidad de precios y de tasas, Usted habla de invertir?
-- Hoy con más razón, porque existe tanta volatilidad de tasas. Hoy hay que financiarse lo máximo que se pueda en pesos y si se accede a la ventaja de tomarlo a tasa fija no es para dudar.
Quien tenga una pyme y necesite crecer, se tiene que conseguir todos los pesos que pueda a tasa fija y si es en leasing ni hablar, porque el efecto fiscal da en una baja de tasas increíble. Hoy es la mejor herramienta fiscal y de crédito que hay en Argentina.
Esa es la manera de renovar equipamiento, camión, maquinaria, etcétera. Y el empresario pyme puede salir a buscar más negocios, porque hoy la economía sigue creciendo. Entonces, la pyme transportista no puede quedarse. Lo peor que te puede pasar es que una recesión te agarre con equipamiento viejo, porque ahí sí te va a costar renovarlo. Estos son los momentos de la economía o de la macro que hay que aprovechar. Realmente esta distorsión de tasas que parecen muy altas y por ejempolo en el leasing, te permiten descontar de ganancias y terminan siendo baratísimas.
-- ¿El leasing es la mejor herramienta para el crédito en este contexto?
-- Para mí es la herramienta del momento. El leasing y una Sociedad de Garantía Recíproca (SGR). Una sociedad que califique a la pyme y que pueda conseguir financiamiento más barato. Lo que hace la SGR es darle un aval para los bancos que donde se presentan por el leasing.
Tenés Garantizar, Crecer, Fogaba y otras más privadas. Cada vez hay más SGR y es lo que se viene. Hoy los bancos están calificando con líneas a clientes que vienen en directo, y con líneas a clientes que vienen con una SGR (asi mejoran sus activos) y logran que les bajen la tasa. Porque al no tener ninguna garantía te dicen, ´no, mirá, yo si vos te lo doy en directo, te voy a cobrar 65%, pero qué pasa si me la presentas en SGR y te la doy a 48´. Esa diferencia de tasa te la consigue la SGR, la mejor garantía. Esto está pasando en el mostrador de los bancos.
-- ¿No está difícil ir a un banco ahora?
-- No, no. Obviamente hay procesos más selectivos, eso sí. Los bancos se resguardan en la crisis. Cubren sus activos de riesgo y obviamente van a levantar su scoring en cuanto a quiénes le prestan. Pero no queda mucha gente afuera.
Las líneas siguen estando disponibles. Si el empresario no tuvo problemas, no es tomador de crédito, tiene buenas situaciones de pago, un balance que lo respalde y con la economía en crecimiento que tenemos, va a poder mostrar que de acá y como referencia la pandemia, su negocio está creciendo, porque estoy seguro no hay nadie que diga “me va peor”.
-- ¿Hay carga para tomar, quizás el problema está en el cobro?
-- Exactamente. Ese es otro tema. Porque hay un estiramiento de plazos. Entonces, qué necesitan: capital de trabajo. Por eso, tienen que ir a una SGR. Porque si el empresario consigue dinero del trabajo, pero no está para comprar un camión o para cambiarlo, sino para financiar sus ventas porque se están alargando todos los plazos de cobranza. Estamos viviendo una economía en la que hay que pensar financieramente. Más que nunca. Y las SGR pueden ser la solución a una necesidad de capital de trabajo y el leasing para bien de capital.
--¿Cómo ve al sector del transporte?
-- Depende del rubro. Hay gente que está más contenta o menos contenta, pero no encuentro gente que esté mal. La verdad que yo no encuentro hoy, no tengo ningún cliente de los míos que me diga, ´che, me va mal´. Tenemos un estallido muy fuerte en los últimos meses de la economía. Estamos todos rogando que, a pesar de los problemas macro que hay, se mantenga por lo menos un 2 o 3% de crecimiento.
-- ¿Y el aumento persistente de costos, eso preocupa?
-- Pero eso es parte del impuesto inflacionario. Eso en lo que te pega es cuando vos estás atado a negociaciones de tipos de cambio, entonces si sos un importador, si estás corriendo con la necesidad de la falta de dólares. Hay restricciones en el mercado y lo sabemos. Yo hablo con clientes míos y me transmiten que hoy, si no importan por tres meses, creo que hoy no les cambia nada. Porque hay un stock muy fuerte, hay gente que se sobrestockeo,
-- ¿Quizás ahí estuvo el “festival de importaciones” con los empresarios buscando ahorrar con stock?
-- Yo sé que hay gente que hizo macanas, seguramente hay que investigar el tema sobre facturación, etcétera, pero la mayoría de la gente compró para tener.
-- ¿Importaron más para resguardarse?
-- Obviamente hubo una reacción. Ante los problemas de inflación se stockearon, abren el depósito, lo ven lleno y siguen. Su reserva de valor está ahí, en ese depósito. Entonces, hoy hay suficiente stock como para decir, bueno, podemos aflojar en esta etapa que es justo el segundo semestre, que es el peor en materia de cuenta corriente. Entonces podemos aflojar un poquito. El único faltante que puede haber es más especulativo que otra cosa.
-- ¿Es optimista, a veces el negocio es sembrar pánico?
-- No, no, creo que es al revés. De hecho hay que llevar tranquilidad. Porque la gente cuando estás en una actividad, lees las tapas de los diarios y se ve mucho ruido. Pero bueno, la realidad es otra, contra los números no hay nada.
-- ¿Y en escala de las empresas, cómo ve a una empresa que tiene 60 camiones?
-- En los últimos dos años de pandemia se ha concentrado mucho el negocio de la logística. Han surgido empresas muy poderosas. Queda un rango de pymes que capaz que tienen 7 ú 8 camiones, que en realidad me parece que son subcontratistas de estos más grandes. Y así trabajan todos. Además aparecieron pooles muy fuertes en materia logística. Empresarios que yo conocí hace cuatro años y eran pymes medianas hoy tienen 250 choferes.
-- ¿Se concentró el sector?
-- La economía y la pandemia ayudaron. A eso se agregó que muchos empresarios supieron moverse rápido para ampliar y renovar flotas mediante el mecanismo de leasing. Muchas empresas grandes tienen la mitad de sus flotas en leasing.
-- ¿Cómo ves a la pyme familiar, los que manejan sus camiones entre el padre, el hijo y el cuñado?
-- Hay que decirles que empiecen a despertarse porque hay un montón de situaciones que tienen que jugar a favor. Desde la FADEEAC apuntamos a ellos. Hay mucho que ayudar al empresario PYME que tiene hasta 7 camiones. A ese hay que ayudarlo a pensar cómo trabajar en una economía semejante. Tenemos que hacer docencia, informarlos y lograr que accedan a los mejores elementos de financiación.